viernes, 23 de septiembre de 2011

CRÓNICAS

THE B-52s





23 de Abril, 2009
Estadio Nacional de Lima


Acabo de regresar del concierto, y debo decir que, con la posible excepción de Iron Maiden y R.E.M., debe haber sido el mejor espectáculo que he presenciado desde que los impuestos por concepto de espectáculos bajaron.

Ahora, me gustaría destacar 2 cosas:

A) Que B-52s, pese a haber tenido un sabático de 16 años entre lanzamientos("Good Stuff" de 1992 fue el último antes del "Funplex") no ha perdido ni un ápice de su energía y originalidad en vivo.
Ni Schneider, ni Pierson ni Wilson demuestran efectos negativos por la veteranía. Su interpretación vocal fue impecable y para el aplauso. Strickland en guitarra y el resto de la banda, si bien se mantienen en un segundo plano visual, demostraron ser mucho más que capaces como soporte musical.
Pero la vitalidad va acompañada por un sentido del humor innegable. Me he reído y disfrutado como nunca, pese a haber estado en una zona relativamente alejada del escenario.
Basta con recordar la sección final de Rock Lobster, donde Schneider improvisa con la cantidad de animales que le pidió a Pierson y Wilson para que imitaran con sus extaños alaridos.

B)Siento que, musicalmente, todavía son relevantes como ente creativo, y han sabido sortear al tiempo.

Haciendo una pequeña extensión de las bases del artículo principal de esta página. Si bien B-52s fue uno de los grupos más mediáticos de la etapa new wave, su sonido tenía una originalidad muy fuerte, así como innegable es su identidad como colectivo musical.
Por ejemplo, la banda, en un inicio, carecía de bajo(una de las similitudes que guardan con The Doors). Ricky Wilson(hermano de Cindy y fallecido por sida en 1985) poseía un estilo de guitarra inigualable, tocando siempre notas bajas, en una combinación de rítmica y solista muy versátil. Punzante pero funky. El contrapunto melódico eran las notas agudas del teclado psicodélico de su hermana.
Punto aparte el trabajo vocal, donde un excéntrico Schneider sólo gesticula y se apoya en las armonías de las chicas, donde mezclan divertidas estrofas y coros kitsch, reminiscentes del surf rock(previo a The Beatles)
Se añade a esta receta una percusión extremadamente dinámica y punky para desarrollar un cóctel que guarda el colorido del new wave y la experimentación del post-punk, y dio lugar a los lanzamientos de The B-52s(1979) y Wild Planet(1980) que están presentes en la colección de todo fan que se precie de seguir al post-punk, y que están, tranquilamente, a la altura de cualquier disco de Talking Heads, Gang of Four, XTC, Elvis Costello, Wire, The Cars, o cualquier otra banda mencionada más arriba.
Luego de casi 10 años, y tras la muerte de Ricky, la banda lanza "Cosmic Thing", un disco decididamente pop, con algunos elementos de su propuesta anterior, donde Strickland deja la guitarra por la batería y se añaden 2 nuevos miembros a la banda. El disco, si bien perdía un poco la honestidad por el comercialismo, tenía una calidad melódica sin par y el sonido B-52s seguía siendo identificable.
Algo similar ha sucedido con el "Funplex", donde se adaptan a las concesiones del pop del nuevo milenio arrastrando elementos de su sonido de finales de los 80's.

Todo este recuento lo hago para describir el concierto que acabo de presenciar.
Tuvo momentos más movidos, momentos más reflexivos, un sonido más agresivo, un sonido más atmosférico, pero el recorrido por los clásicos de más de 30 años de carrera mantiene casi el mismo nivel y no existieron puntos bajos en realidad.

Pareciera que es 1980 y la fiesta de 2 horas es interminable. Una larga noche psicodélica y optimista donde, estoy seguro, cada asistente perdió el cable a tierra por completo.

Y, para rematar, nos regalaron 1 hora con los legendarios New York Dolls.
No se puede pedir más.





PARTY OUT OF BOUNDS!!!





Setlist:


Pump
Mesopotamia
Ultraviolet
Private Idaho
Give Me Back My Man
Funplex
Strobe Light
Quiche Lorraine
Juliet of the Spirits
Roam
Party Out Of Bounds
Love in the Year 3000
Hot Corner
Channel Z
Love Shack

Encore:

Planet Claire
Keep This Party Going





















POR QUÉ ESCUCHAR A ESTAS BANDAS?

R.E.M.



R.E.M. es realmente una anomalía. Debe haber algo especial en un colectivo musical que puede reconstruir su fórmula tantas veces como quiera y no saturar en el proceso. Desde sus inicios garajeros en Chronic Town, de claro sabor underground, lleno de una energía nerviosa y promisoria; a sus sublimes ejercicios pop en Automatic for the People y New Adventures in Hi-Fi, R.E.M. nunca cambió su sonido insigne y tremendamente influyente. Podría entenderse como una reinterpretación del sonido barroco y luminoso del folk rock y country rock sesentero por medio de un filtro punk, pero la banda tomó dichos elementos como propios y le añadió una frescura irresistible, convirtiéndose en una de las bandas definitivas de los 80s, con el agregado de poseer un sonido reconocible al instante (casi inconcebible para una banda de la década)

La lúdica sección rítmica de Bill Berry y Mike Mills apoyaba de forma brillante el arsenal melódico del gran Peter Buck y, aunque apenas entienda lo que Michael Stipe está tratando de comunicar en su canto, siempre he adorado su tono gentil y sincero, capaz de emitir su mensaje sin usar palabras (quizá "murmullos"?) haciéndote acordar que existen personas que aún disfrutan escuchando música pop sin pensar en ella como un placer prohibido y, al mismo tiempo, olvidar que eras testigo privilegiado del nacimiento y evolución de todo el rock alternativo.

Hace unos pocos días, en esta semana, la banda se separó.
Ya comienzo a extrañarlos...pero para eso están los discos, no?...And I Feel Fine!